¡QUE NO OS SEPAREN! - Hablan las mujeres... y algunos hombres
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Hablan las mujeres... y algunos hombres

Si quieres contarnos tu historia puedes escribirnos a testimonios@quenoosseparen.info

El Parto es Nuestro conoce los datos de los protagonistas de estos testimonios pero los preserva por deseo expreso de sus autores.

38 semanas. Un niño ha sido diagnosticado de deficit de atención. Los especialistas le explican que quizá todo se deba a la forma en que llegó al mundo.

Marta e Inés. Inés fue ingresada en un hospital a los cinco días de vida. Su madre se alojó con ella. En este relato nos cuenta cómo transcurrieron esos días y comparte sus recuerdos y sensaciones al respecto.

"Recuerdo aquellos ratos con mi niño en la teta en aquellas butacas con mucha ternura, recuerdo mis nervios cuando traían a los bebés, porque yo no quería perder ni un minuto y quería que el mío viniera el primero, recuerdo la emoción cuando veía a la enfermera con mi niño al brazo y recuerdo también cuando venían a llevárselos de nuevo, era horrible, aunque mi niño no estuviera mamando hacía como que seguía mamando para que me lo dejaran un poco más y se lo llevaran el último, cuando lo entregaba a la enfermera, sentía que me arrancaban un trozo de mi cuerpo y recuerdo salir de allí y cuando iba por el pasillo, echar una última mirada a la cuna de mi niño y verle allí tan guapo y tan solito. Era desgarrador"

Mi primer parto se convirtió en una pesadilla para mi hijo y para mí, pues además de muchas otras cosas, nos separaron. No pudimos conocernos sino hasta el día siguiente de su nacimiento, y yo no sentía que era mío; ambos la pasamos muy mal. Sin embargo con mi segundo hijo fue diferente, estuvo en mi pecho casi al nacer: el flechazo fue inmediato. Historia de Andrea

Cesárea de Marina -video- Esta mujer parió a su hijo por cesárea. NO fueron separados. Video de una cesárea respetada.

"Al final las pruebas demostraron que dicha infección nunca había existido. Lo que había ocurrido es que había venido a este mundo con la misma temperatura que su madre tenia en ese momento. Mi niño había sufrido por el excesivo intervencionismo médico durante el parto, y para recuperarse lo único que necesitaba era estar cerca de mí, los dos solos y tranquilos, pero se lo llevaron y eso nos causó mucho sufrimiento.
Tiempo después descubrí que el cuerpo de la madre es capaz de regular la temperatura del cuerpo de su bebé hasta bajarle incluso dos grados de fiebre, sólo con el contacto piel con piel. Me duele saber que estuvimos separados innecesariamente"

¡HAN DICHO QUE SI!, que acceden al alojamiento conjunto. Y por escrito. Es evidente que las "barreras" no están por arriba (más bien por el medio). Se me ha atendido muy bien y ante los argumentos de peso (sobre todo la Ley de hospitalización) no han podido sino admitirlo. Añaden en el escrito "a pesar de las barreras que existen en la estructura actual del área materno-infantil y que originan una dificultad añadida en su organización, esperando que pueda solucionarse en el futuro, una vez se acometan las necesarias reformas". Lo que habla de la voluntad de cambiar

"Y entonces me lo dió. Lo cogi en silencio, tenía los ojos muy abiertos y me miraba, lo puse directamente al pecho y se prendió directamente y empezo a mamar. Me invadió una paz inmensa, no sé si llegue a llorar, sentí como fluía mi leche, le di su primer abrazo y apenas pude pensar nada más. Sentí que todo iba a ir bien, el sería fuerte y yo tambien. Fue como si en ese momento el acabara de nacer y nos reconocieramos mutuamente despues de 9 meses. Creo que fue el momento más especial de toda mi vida."

Preocupada fui al nido a ver que pasaba. Cuando entré todos estaban al fondo de tertulia. Reían a carcajadas mientras mi hija lloraba de hambre en la urna. Su llanto me llegó hasta el alma, ellos ni lo oían. Le pedí que me la dieran para alimentarla. Y me dice un supuesto pediatra, porque ahora hasta dudo que lo fuera: "No, no, no... vete a acostarte que ya le damos un biberón". Historia de Carmen

Estaba atada a la camilla, la di un besito y se la llevaron. No la volví a ver hasta 7 días más tarde. Ni siquiera la había podido acariciar. Me había imaginado mil veces el parto, mi primer momento con el bebé, pero nunca así. Historia de María Gómez

Yo no quise irme del hospital y dejarla allí. Yo me hubiese muerto de pena y ella seguramente de soledad. Ahora, seguramente ante la misma situación, los médicos me pondrían muchas más pegas para llevármela, pero creo que me la llevaría de todas maneras, porque es mi hija y estoy convencida de que fue el cariño y los cuidados que yo le brindé durante esos meses lo que consiguió salvar su vida. Ninguna incubadora puede sustituir al calor de una madre. Historia de Ángela

Yo no conocí a mi hijo hasta 8 días después y todo porque en Valdepeñas no me trasladaban a Toledo con mi hijo. En Toledo las enfermeras le preguntaban a mi marido por mí, le decían que allí me podían ingresar y podría estar cerca de mi hijo.

Fue la noche mas larga de mi vida. No podía dormir, solo pensaba en donde estaba Daniel "¿Estará en la misma planta o en otra? ¿O incluso en otro edificio?" No podía parar de pensar en él, me dolía saber que el no sabía nada, que nadie le habría explicado donde está. Ninguna voz familiar, ningún olor conocido. ¿Alguien le habrá dicho que su madre está deseando abrazarle? No podía moverme. Me enloquecía pensar que en ese momento era una enfermera y no su madre la que estaba bañándole, porque eso podía confundirle y hacerle pensar que era ella y no yo, su verdadera madre.

"La verdad es que no lo entiendo, ¿por qué la separaron de mi?., ¿por qué no me dejaron darle el pecho? A mí me operaron, pero no tuve dolor, no tuve fiebre, por lo que podía estar con mi hija y darle el pecho. ¿Por qué no dejaron esa noche a mi hija conmigo?"

El ingreso de Nacho. Menos mal que nos han dejado juntos en todo momento: mientras te pinchaban para sacar sangre, cuando te sondaron y lloraste tanto... no nos han separado y eso hace todo más fácil, porque para ti yo soy tu casa.

 

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